#03 , Hotel Atracción

Antoni Gaudí , 1908

Cuando el Nuevo continente llamaba a Gaudí” una serie de dibujos realizados por el maestro y recreados por él mismo bajo su supervisión que describen un ambicioso rascacielos, una nueva figura para el skyline de Manhattan.

Antoni Gaudí i Cornet, el gran maestro del modernismo catalán. Desde la Sagrada Familia a la Colonia Güell llegando a las islas Baleares con la reconstrucción de la Catedral de Mallorca, entre otras grandes obras, todos conocemos su legado. ¿Pero fue realmente este el alcance que tuvo su contribución? Siendo conscientes del reconocimiento global que tiene actualmente el arquitecto catalán, no nos sorprendería descubrir que no, sin embargo, la publicación de su proyecto americano en la memoria publicada por Joan Matamala en 1960 se vio rodeada de una gran polémica dado lo desapercibido que había pasado semejante proyecto en aquella época.

Hablamos del Hotel Atracción, la visión de Gaudí para lo que en su momento habría sido el edificio más alto del mundo, en Nueva York, concebido entre 1908 y 1911, previo a la construcción del Empire State. Joan Matamala nos desvelaba en “Cuando el Nuevo continente llamaba a Gaudí” una serie de dibujos realizados por el maestro y recreados por él mismo bajo su supervisión que describen un ambicioso rascacielos, una nueva figura para el skyline de Manhattan.

Alcanzando los 360m de altura, el edificio de uso mixto pretendía combinar programa residencial, restaurantes, museos, galerías de arte y auditorios. Conformado por un cuerpo central de planta circular rodeado por 8 volúmenes laterales más bajos que albergarían los museos, con un total de 4 entradas. El cuerpo central estaría dedicado a 5 grandes salones superpuestos en vertical, uno para cada continente, rematados con el gran salón de Homenaje a América, que alcanzaría los 125m de altura, más de un tercio de la altura total. El edificio quedaba conformado en una forma parabólica con una base que llegaría a ocupar un área de 115 x 140 metros, empleando en sección el uso de la geometría en catenaria tan característica del arquitecto. Detalles del diseño que permitieron dar credibilidad a la publicación de Matamala, posteriormente analizada, estudiada y confirmada por el arquitecto mexicano Marcos Mejía López, en su tesis doctoral. 

En su investigación, Mejía encuentra diversas similitudes estilísticas entre el proyecto neoyorquino y diversas obras de Gaudí, especialmente entre la bóveda del salón Homenaje a América y la del Palacio Güell, entre los cuerpos laterales del edificio y la fachada de la Casa Milà, y el conjunto del hotel comparado con la Cripta de la Colonia Güell.

Gaudí proyectó la construcción en una combinación de sistemas constructivos, hierro, cemento, piedra y ladrillo para la estructura, acompañados de sus característicos mosaicos cerámicos y culminando en grandes cúpulas vidriadas. Todo un repertorio de las técnicas constructivas del momento. 

Definido como un hito, el proyecto habría erigido una catedral en el nuevo mundo, que como tal, no respondería a la religión sino a aquello que hizo grande la nación americana, el carácter emprendedor y desafiante de un pueblo unido en la lucha por la libertad y las nuevas oportunidades. Una obra cargada de simbolismo que incluso estuvo sobre la mesa una vez más cuando el pueblo americano quiso reinventarse tras una de las peores tragedias de la historia, en la reconstrucción de la zona 0. Parte que no deberá ser olvidada, de la obra, de nuevo no finalizada, en este caso ni empezada, por la que tan conocido es el nombre de Antoni Gaudí.

 

Autor: Antoni Gaudí
Ubicación: Nueva York, Estados Unidos.
Año: 1908

Artículo: Unbuiltarch,
Enlaces de interés:
www.metalocus.es/es/noticias/manhattan-y-el-hotel-attraction-de-gaudi
www.youtube.com/watch?v=wD0f_56hSTc&ab_channel=JaviRod.
www.antoni-gaudi.com/hotel-attraction/