#05 , Museo Mercedes Benz

Alberto Campo Baeza+Alberto Morell Sixto, 2002

Queríamos construir una idea clara: la idea de movimiento: la razón de ser del automóvil, como tema central para el nuevo museo de Mercedes Benz en Stuttgart.”

Nos encontramos en el inicio del siglo XXI, un momento único en la historia reciente de la arquitectura, nos acercamos a los instantes de máxima expansión de la burbuja de la construcción y todo parece posible. Si se puede imaginar se puede construir.

En esta atmósfera de constante innovación, inquietud, y un poco de locura formal y tecnológica que se respiraba en el campo de la arquitectura, la histórica firma automovilística Mercedes-Benz hace una llamada a los arquitectos más rompedores del momento para un concurso que definiría su nuevo museo en Stuttgart. Una celebración de la historia de la marca que quería integrarse y completar el paisaje de industria monumental que definía una de la entrada este a la ciudad, junto a la autopista B14.

Se trata de una oportunidad única para reflexionar sobre uno de los temas más candentes de la época, la velocidad y el movimiento. Ese elemento que claramente estaba definiendo las ciudades y que ya se establecía como sinónimo de modernidad alrededor del mundo se acercaba a una escala en la que prácticamente estaba por debutar. Una oportunidad que los arquitectos, Alberto Campo Baeza y Alberto Morell Sixto, no dejaron escapar.

En este contexto se define la propuesta de estos dos grandes arquitectos españoles. En sus propias palabras:

“Queríamos construir una idea clara: la idea de movimiento: la razón de ser del automóvil, como tema central para el nuevo museo de Mercedes Benz en Stuttgart. Como base material, con posibilidad de ida y vuelta, concebimos un trozo de autopista elevada con traza helicoidal, con una banda central para los visitantes del museo y una banda lateral para los coches en exposición, cubierto todo ello con una caja de vidrio. Y otra banda lateral descubierta, sobre la que estarán los coches en movimiento.

Para responder al lugar: una encrucijada entre una carretera, una autopista elevada y un río, creamos un gran podio, en el que se incluye todo el programa de elementos servidores, a cuyo plano superior se accede por amplias rampas y sobre el que emerge la potente pieza helicoidal.

Todo en hormigón visto. Sencillo y rotundo. Intentamos así, para el nuevo museo de Mercedes Benz construir una imagen capaz de sorprender y fascinar. Capaz de permanecer en el tiempo y en la memoria.”

Una imponente obra que desafía las tipologías existentes de museo y da una respuesta única a su contexto. Literalmente se domestica y acerca a la escala humana la impotente infraestructura que supone una autopista. Doblándola y elevándola en un gran esfuerzo estructural que contrariamente parece conseguirse con facilidad, con contados núcleos verticales y con una envolvente de cristal que se diluye en el cielo. Un hito elevado sobre un podio que mantiene el realismo de la propuesta, definiendo los espacios servidores en un gesto que reclama el orden y la funcionalidad, dando balance a la locura expresada en el hito definido con la pieza principal del museo y que actúa de intermediario con el terreno y el contexto industrial que rodea al edificio al mismo tiempo que es capaz de definir un nuevo plano, una cota cero inexpresiva que incrementa la monumentalidad del elemento helicoidal gracias a su neutralidad.

Y más allá de los aciertos del proyecto, debemos poner atención también a la documentación presentada, en especial al vídeo del proyecto. Una pieza ejemplar que describe muy acertadamente la calidad del proyecto y sus peculiaridades, siendo capaz de transmitir la idea de movimiento y continuidad espacial. Una documentación gráfica que en coherencia con el proyecto hace uso de técnicas establecidas del estilo del collage de forma innovadora, aportándole movimiento, de la misma forma que la propuesta trata la infraestructura o el hormigón en sí mismo.

La pureza de la propuesta sin embargo no les otorgó el primer puesto en el concurso, finalmente el edificio realizado fue el de la firma UNStudio. Pero eso no le quita valor alguno a un proyecto único con elementos que podremos entrever posteriormente en otras obras de gran éxito de Campo Baeza.

 

Autores: Alberto Campo Baeza+Alberto Morell Sixto
Ubicación: Stuttgart, Alemania.
Año: 2002

Artículo: Unbuiltarch,
Enlaces de interés:
www.campobaeza.com/mercedes-benz-museum/
www.campobaeza.com/video/mercedes-benz-museum/