Germán Bosch Domingo
El proyecto final de carrera se ha interpretado como un manifiesto de todo aquello que se ha ido recogiendo y aprendiendo a lo largo de todo el proceso universitario. Es, también, una primera tirada de dados de cómo entiende cada uno la arquitectura y, en cierta manera, de cómo enfocarse a futuro: cómo tratar el proyecto a muchas escalas, como dibujarlo y cómo resolverlo dentro de los límites del ámbito educativo.
Constituido por un volumen en altura y un cuerpo longitudinal que reconstruye el eje de la antigua puerta medieval junto con un mimado tratamiento del espacio público, la propuesta consigue trabar en medidas y proporción una intervención que reformula el entorno. La construcción de un proyecto que signifique dentro de la ciudad el ámbito de Isartorplatz es el objetivo urbanístico prioritario, abordando la cuestión desde la escala urbana con la construcción de un edificio en altura y la escala próxima a través del espacio público y la construcción del plano virtual que cierre la perspectiva respecto a la puerta medieval de Isar Tor. La propuesta respecto a la urbanización se agarra a los planos urbanos, logrando una continuidad visual de prácticamente todos ellos a través de los volúmenes, vinculados en planta baja por espacios continuos pero caracterizados singularmente mediante mobiliario, preexistencias y propuestas de acupuntura urbana. Este fenómeno clarifica el antiguo claro vacío y desordenado de Isartorplatz a través de una articulación de diferentes estancias urbanas abiertas, protegidas del tráfico y vinculadas a las preexistencias la nueva arquitectura en un conjunto de singularidades que se propone como “varias plazas” o Isartorpätze.
El volumen longitudinal es, en este caso, el objeto del proyecto, dando cabida a un equipamiento docente dentro de un edificio modular de estructura metálica que permite ofrecer espacios nuevos para la docencia. Se entiende la pieza como un contenedor diáfano de programa que puede adaptarse a diferentes usos, cambios y actividades manteniendo siempre unos valores arquitectónicos, de sostenibilidad y funcionalidad.
Constructivamente se resuelve a través de nueve pórticos de acero de los que descuelgan las tres plantas del aulario, dejando libre la planta baja a dos niveles. Esta propuesta permite incorporar un espacio deportivo compartido para la escuela y la ciudadanía con un acceso directo al intercambiador del S-Bahn. Lejos de quedar en semisótano, se propone la apertura de este lugar al espacio público mediante un graderío exterior que lo ponga en relación con uno de los ámbitos definidos en la propuesta urbana. La planta baja se minimiza para dar cabida a la pista deportiva a la vez que se resuelven los accesos de manera concentrada e independiente.
La solución de las plantas se propone dinámica, configurable, flexible hasta donde la actividad docente quiera proponer. Los lugares colectivos articulan las áulas así como talleres o laboratorios. La reflexión queda así en manos de los planes docentes y como estos son capaces de reformularse dentro de ámbitos flexibles que invitan a dinamizar algunos métodos de enseñanza. Todos los espacios gozan de ventilación natural a través filtrada respecto a las desfavorables condiciones del invierno de Múnich, un control lumínico y de condiciones atmosféricas pasivo.
Cabe mencionar la cuestión bioclimática, abordada desde la construcción de un contenedor contenido que intercambia energía con el exterior a través de una doble piel continua en tres dimensiones. Este borde de relación dentro-fuera filtra las condiciones del entorno (adaptando diferentes sistemas y energías enlazadas) que permiten aprovechar un control climático pasivo y dinámico que reduce el gasto energético más allá de los estándares del nZEB. Esta piel garantiza su funcionamiento termodinámico mediante la construcción de un forjado sanitario a modo de pozo canadiense, complementándose con un invernadero en el bajo cubierta que garantiza el tiraje natural del aire. Este fenómeno se produce sin asistencia mecánica a través de los espacios de fachada, disponiendo de los filtros solares orgánico e inorgánico que contribuyen a la definición de espacios arquitectónicos apropiables por cualquier actividad que en el interior se proponga.
Autor: Germán Bosch Domingo.
Website: issuu.com/ger.bosch/docs/portfoli_german_bosch
Ubicación: Munich, Alemania.
Universidad: ETSAB.
Año: 2019